...beer for my horses

Bueeeeeeno... Hoy no hay despertador. Nuestro plan es hacer 300km hasta Bloomington, Indianapolis. Nuestro único compromiso es estar a las 7 para ir al concierto de Toby Keith.

Estos días andamos retrasados con los posts, ya os habréis dado cuenta. Por un lado el del 11S ocupaba mucho y el teléfono no daba para más, petaba sin dejarme publicar. Por otro. nos ha costado tener un wifi con la calidad necesaria para poder subir tanto las fotos como los vídeos. Podíamos haberlos subido con menos resolución, pero nuestros lectores no se merecen menos.

Hemos sobrevivido al frío de ayer; llegamos a pensar que un resfriado nos fastidiaría los planes. Nos ponemos a buscar un sitio donde desayunar, pero los Starbucks que el Tomtom dice que están en ruta han desaparecido. Una ciudad extraña esta de Normal, Illinois. De normal tiene el nombre...

Vemos algo que parece un súper y decidimos comprar algo para comerlo junto a Willie. Resulta ser una tienda de comida orgánica (¿existe comida no-orgánica?) y compramos unas plátanos bananas. Desayunamos lo que deberíamos haber cenado ayer y viceversa. !Qué coño, tío! ¡Estamos de vacaciones!

Norteamérica tiene dos partes.

La primera son las viviendas. Todo el mundo, pero TODO el mundo vive en una casita unifamiliar. Ricos y pobres. Como en Los Simpsons. No hay ciudades como las conocemos nosotros, con sus bares y sus tiendas, excepto en el centro de algunas grandes ciudades.

La segunda son las tiendas. No hay tiendas de barrio, porque no hay barrios. Todo son construcciones tipo centro comercial: un edificio con el negocio que sea y un gran parking enfrente para que puedas ir con el coche.

Las carreteras son rectas. Muy rectas. Los coches automáticos. La velocidad es limitada y la policía es estricta. La circulación es poca y la conducción es... aburrida.

Aburrida hasta que llega un semáforo o un stop. Ya lo conté el año pasado, pero dejadme que lo repita, que hay gente nueva.










Los semáforos están al otro lado de la calle, lo que es mucho más cómodo para esperar. Puedes pasarte el semáforo en rojo si es para girar a la derecha (como si fuera un stop), excepto si está indicado que no puedes. Pero, aunque sea legal, la costumbre hace que te sientas raro, como con miedito.










Lo del stop sí que acojona. Resulta que todos tiene stop. Los cuatro. Así que llegas a un cruce y te paras. Y luego pasas en orden de llegada. Así que tienes que ir contando quién llega antes y quién despues...

A todo esto, con tanto conducir y tanto barrio residencial, pues nos ha entrado hambre. El menú de hoy es.... ¡Hamburguesa!

Paramos en un bar de carretera, construído en madera y diseñado por camioneros para motoristas. Ingrid se decide por una de pollo. Yo no me atrevo a serle infiel a mi ternera y me dan la hamburguesa más fea que he visto en mi vida.










No era ni redonda ni cuadrada. Tenía forma de mapamundi. Si la hacen más casera, sale la cocinera a decirme que o me la acabo o me la pone para cenar...










Vale, hemos conducido y hemos comido. Muy bonito todo. Pero ¿y el country?

Pues tenemos entradas para ver a Toby Keith (que aquí se pronuncia Toby Quiz, ya ves tú).











Toby es uno de mis cantantes preferidos de country. Junto a Alan Jackson y Billy Yates, para mí forman la Santísima Trinidad, no sabría por cual decidirme. Por eso este es el concierto que más ilusión me hace.

Es un concierto al aire libre aunque la zona más próxima al escenario está cubierta y tiene asientos.



















De teloneros actúan Krystal Keith y Colt Ford. Parece que es una costumbre que antes de los padres actúen los hijos...










Otra costumbre es usar el flash del móvil... Se ha perdido el romanticismo de los mecheros...

Y sale Toby... y está fondón. Ha creado una franquicia de restaurantes llamada I love this bar & grill y ha debido probarlos todos...




























También es posible que se deba a la falta de ejercicio... ¡Muevete un poco, hombre! Ni salta ni baila ni nada... El escenario tiene una pasarela que le acerca al púbico, que para lo que la ha usado ya la podían haber desmontado.

Ese borrón blanco sobre Ingrid es Toby Keith, aunque parezca una aparición mariana.









La verdad es que parece que se ha tirado a por la pasta. La gira patrocinada por Ford, con videoclip promocional antes del concierto. Hay una entrada VIP que te permite entrar al camerino y que te firme algo, pagando, claro. Las camisetas y gorras que venden las ha debido pintar Toby a mano en persona, por lo que cuestan.

Incluso en alguna canción no sabría deciros si es que desafina o es que se versiona a si mismo...



En una de las canciones, canta Willie Nelson pero en playback.



Toby Keith basa gran parte de su imagen en el patriotismo americano, aunque aquí todo el mundo es muy patriota. Tiene varias canciones de apoyo al ejército como American Soldier o Call a marine. En el único bis que hace canta Red, white and blue y hace subir al escenario a algunos militares que hay entre el público, incluso de uniforme, a los que les da las gracias por la libertad. Además cambia la guitarra por otra con la bandera.

En algunas cosas, envidio este país.









Un gran concierto que disfrutamos mucho (aunque critique algunas cosas).

Willie nos espera en el inmenso parking. Nos espera un buen rato porque nos perdemos y tardamos un rato en encontrarlo. Suerte que hay mucha gente muy amable de la organización que si le dices el número de parking te dicen donde está. A no ser que no te hayas dado cuenta de que, además de número, hay colores...

font color="orange" face="Zapfino">Juan Carlos